La combinación de la iconografía cristiana con el diseño distintivo de Gaudí hace que la Sagrada Familia sea una estructura diferente a todo lo que hayas visto. Aunque la gente suele centrarse en los exteriores de este espectacular monumento, hay muchísimo que ver en el interior de la basílica de la Sagrada Familia: las vidrieras, las columnas y la cripta, entre otros muchos aspectos.
Al caminar por la catedral, te sorprenderá la enorme magnitud de la construcción. A Gaudí se le conoce por utilizar la naturaleza como su musa, lo que podrás comprobar en las enormes columnas dentro de la catedral, ya que han sido construidas para parecerse a los árboles que crecen en un bosque. De esta forma, tendrás la sensación de ir caminando por un jardín botánico en lugar de por un sitio de culto religioso.
Lo que te sorprenderá de las vidrieras que adornan las paredes es la forma en que Gaudí imaginó su estructura. Los colores de cada cristal han sido elegidos en función de la hora del día en que el sol brillaría a través de la ventana, llenando la sala de azules y rojos para representar el nacimiento y el sufrimiento de Cristo.
El ábside es una estructura semicircular en la que se encuentra el altar y sobre la que se alza una cúpula. Gaudí se aseguró de que el ábside de la basílica fuera ligero y abierto y lo diseñó de manera que la luz natural del exterior incidiese en él. El ábside alberga siete capillas, dedicadas a los siete dolores y alegrías de San José.
En el centro del ábside y directamente sobre la cripta se encuentra el altar, cuyo techo es más alto que el resto del ábside para acentuar su divinidad. Siguiendo la tradición, sobre el altar hay un dosel, también conocido como baldaquino.
El altar tiene forma de heptágono y contiene siete aristas que representan los siete dones del Espíritu Santo. Además, las cincuenta luces colgantes iluminan los bordes del baldaquino de los que brotan vides de uva y trigo, símbolos de la Eucaristía. También encontrarás aquí la oración de la Gloria escrita en una cinta atada alrededor del baldaquino.
Aunque Gaudí fue el principal arquitecto de la basílica, tras su fallecimiento, el proyecto fue continuado por quienes compartían su visión. Entre ellos se encontraba el arquitecto Jordi Bonet, responsable de la creación del Padre Eterno.
El Padre Eterno se ve claramente desde la entrada de la Gloria y es un símbolo triangular situado en el gran hiperboloide justo encima del presbiterio, donde se encuentran los sacerdotes. El triángulo dorado, enmarcado por el hiperboloide, simboliza al Padre Eterno.
La puerta de la Gloria de bronce fue diseñada por el controvertido escultor Josep Maria Subirachs. Esta puerta forma parte de la inacabada fachada de la Gloria y tiene inscrita la oración del Señor en más de 50 idiomas diferentes. La oración del Señor se colocó al azar y, por casualidad, el picaporte de la puerta también tiene inscritas las letras "A" y "G" en referencia a las iniciales de Antoni Gaudí.
La fachada de la Gloria, una vez terminada, funcionará como entrada principal a la basílica.
La cripta, que alberga la tumba de Gaudí, es una capilla donde se celebran regularmente las misas. Se encuentra bajo el ábside y se accede a ella por una escalera. La cripta está coronada por una gran bóveda adornada con una imagen de la Anunciación a María.
En el interior de la Sagrada Familia hay cuatro capillas, cada una de ellas con su propio dedicatario: la Virgen del Carmelo, donde está enterrado Gaudí; Jesucristo; la Virgen de Montserrat; y Cristo Crucificado, que alberga la tumba de Josep María Bocabella. El suelo de la cripta está decorado con un mosaico romano que representa espigas de trigo y vides. Toda la cripta se considera Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Explora la criptaLa construcción de la basílica, como la de la mayoría de las iglesias, estaría incompleta sin la presencia de un instrumento. En este caso, el órgano se apoyaría en 8000 tubos para poder escuchar la acústica desde todos los rincones de la basílica.
El órgano está actualmente en proceso de construcción, pero se está elaborando de manera que permita tocar cada elemento individualmente, así como en armonía. La basílica está preparando el camino para una experiencia religiosa realmente inigualable.
En este museo se exponen las maquetas y los gráficos y diseños que representan los planes de construcción de Gaudí. Aunque muchos de sus diseños originales fueron quemados o destruidos durante la Guerra Civil española, los planos que se pudieron reconstruir o rescatar están ahora a disposición del público.
Mientras que todos los grabados de las paredes de la basílica se hacían a mano, hoy en día se ha recurrido a los ordenadores y a las máquinas para ayudar a contruirlos. Los visitantes pueden ver cómo los arquitectos trabajan para completar lo que aún no está terminado de la catedral de Gaudí.
Desde sus vidrieras, capillas y altares, hasta sus torres dedicadas a los apóstoles, la basílica de la Sagrada Familia es una maravilla arquitectónica que representa la vida de Jesucristo.
Sí, puedes recorrer el interior de la Sagrada Familia después de comprar las entradas. Puedes elegir una visita guiada o una audioguía disponible en varios idiomas para aprovechar al máximo tu visita. Una visita a la basílica te llevará entre 3 y 4 horas de tu día.
Para entrar en la Sagrada Familia se necesita una entrada. El tipo de entrada que adquieras dependerá de las zonas que quieras ver, ya que existen diferentes opciones. Puedes comprar las entradas de la Sagrada Familia por Internet.
Los grabados, la cripta que alberga la tumba de Gaudí, las vidrieras, el baldaquino, y las columnas arborescentes son elementos imprescindibles dentro de la Sagrada Familia.
Sí, puedes entrar en el interior de la Sagrada Familia. Dos de las tres fachadas están terminadas y abiertas al público.
La basílica tiene 4500 metros cuadrados y capacidad para albergar a 14000 visitantes a la vez. Una vez terminada, la torre dedicada a Cristo tendrá 172,5 m, lo que convertirá a la basílica en la iglesia más alta del mundo, superando a la catedral de Ulm en Alemania.
La construcción de la basílica comenzó en 1882, siguiendo el diseño del arquitecto Francisco de Paula del Villar. En 1883, Gaudí se hizo cargo del proyecto y trabajó en él hasta su muerte en 1926.
Las tres entradas de la Sagrada Familia simbolizan las tres virtudes del Amor, la Esperanza y la Fe. Las columnas están construidas para simbolizar a los santos subiendo al cielo y a los ángeles bajando a su encuentro. Los diferentes colores de las vidrieras simbolizan el nacimiento de Cristo, la resurrección, el agua y la luz.
Las columnas del interior de la Sagrada Familia adquieren tonalidades azules, rojas, verdes, amarillas y ocres gracias a las vidrieras.
La fotografía comercial no está permitida en el interior de la Basílica. Se requiere un permiso especial para entrar con equipo fotográfico profesional. Sin embargo, eres libre de tomar fotos con teléfonos con cámara.
No, necesitas comprar entradas para entrar en la Sagrada Familia. Las entradas para entrar en la basílica cuestan a partir de 17 euros por persona, y pueden llegar hasta 33 euros por persona, dependiendo de la entrada que compres. Una entrada simple no incluye el acceso a las torres.
Como iglesia católica en funcionamiento, se espera que los visitantes sigan el código de vestimenta mientras visitan la Sagrada Familia. Para entrar en el interior de la basílica, se debe llevar ropa que cubra los hombros y llegue por debajo de la mitad de los muslos. No están permitidos los sombreros, los trajes de baño ni los trajes con contenido promocional o con diseños ofensivos o que distraigan la atención.
Los exteriores de la basílica son un espectáculo en sí mismos, pero los interiores cuentan una historia totalmente diferente. Te quedarás asombrado por los grabados, el juego de luces y colores, y la magnitud del esfuerzo realizado en el diseño de la basílica.
El horario de apertura de la Sagrada Familia es de 9:00 a 18:00 todos los días, aunque el horario de cierre puede prolongarse hasta las 20:00 entre abril y septiembre. Los horarios pueden variar en los días festivos del año, incluida la Navidad.
La misa se celebra en la basílica todos los domingos a las 9:00 de la mañana. La entrada a la misa es gratuita, pero el aforo es limitado. La misa dura cerca de una hora y se celebra en varios idiomas.